Por qué debemos creer en la sabiduría de los cuentos
Los cuentos de hadas son probablemente las historias más leídas del mundo. También son una de las tradiciones narrativas más antiguas conocidas por el ser humano. Historias como Aladino, El principito, Cenicienta, Jack y las habichuelas o El libro de la selva llevan miles de años entre nosotros. ¿Por qué nos gustan tanto? Porque están llenos de lecciones. Nos ayudan a aprender a ser una buena persona y un buen amigo, a enfrentarnos a nuestros miedos y a volver a confiar en los demás, y a superar los celos o a vivir felices para siempre con nuestro verdadero amor.
En este artículo, exploramos por qué debemos creer en la sabiduría de los cuentos pueden ser una herramienta tan poderosa para enseñar lecciones de vida tanto a los niños como a los adultos, así como a los adultos que intentan mejorar sus vidas.
¿Qué nos enseñan los cuentos de hadas sobre la vida?
Los cuentos de hadas ayudan a los niños a aprender sobre el mundo, sobre sus relaciones con los demás y sobre sí mismos. Pero estos cuentos también nos enseñan a ser mejores personas en nuestra propia vida. Las lecciones de los cuentos de hadas son universales, tanto si eres un niño de cuatro años como un adulto. Estas historias no son sólo cuentos interesantes para dormir, sino que pueden sernos útiles en nuestra vida diaria. Las narraciones, las historias, las fábulas o las metáforas son más poderosas e impresionantes que los buenos argumentos lógicos muchas veces.
Los cuentos de hadas como lecciones morales
Los cuentos de hadas, como cualquier otra buena historia, enseñan lecciones. Aunque no podamos encontrar moralejas en todas las historias, o en todos los personajes, hay algunos temas comunes que tienen los cuentos. Estas moralejas pueden encontrarse, de alguna manera, en la mayoría de los cuentos, y son algunas de las lecciones más importantes que podemos aprender como personas. En primer lugar, los cuentos de hadas nos muestran que ser bueno no siempre es «genial» o «divertido». Ser bueno no nos da lo que queremos, pero nos hace felices. De este modo, los cuentos de hadas nos enseñan que sólo porque queramos algo, no significa que debamos conseguirlo.
Los cuentos de hadas como historias para el autodesarrollo
Los cuentos de hadas son también un tipo de historia de autodesarrollo. Esto significa que nos ayudan a crecer y a convertirnos en una mejor versión de nosotros mismos. El cerebro es un ordenador especializado en el emparejamiento de patrones y que busca esquemas repetidos cuando escuchamos algo nuevo. Cuando nos encontramos con información metafórica, el sistema de emparejamiento de patrones de nuestro cerebro se estimula, ayudándonos a ordenar y proyectar nuestros propios esquemas cognitivos en la narración. Cuanto más contradictoria es una información, más difícil es alterarla, más distintiva es. Las metáforas, al ser un enfoque global, son más bien una tarea de dentro a fuera. El cerebro buscará experiencias preexistentes que encajen en el esquema de la metáfora para encontrar conexiones y es en este punto donde encontramos el autodesarrollo.
Todos tenemos diferentes puntos fuertes y débiles. A algunos se nos dan mejor las matemáticas, mientras que otros tienen un talento natural para la poesía. Podemos utilizar los cuentos como una forma de explorar y descubrir nuestras propias habilidades y talentos. Esta autoexploración puede ayudarnos a aceptar mejor quiénes somos.
¿Cómo utilizar los cuentos para enseñar a los niños?
Hay innumerables maneras de utilizar los cuentos de hadas para enseñar a los niños y a los adultos. Estas lecciones pueden hacerse con niños de cualquier edad, pero son especialmente útiles para los más pequeños. Puedes utilizar los cuentos para enseñar a los niños el valor de la amistad. Puedes utilizar los cuentos para enseñar a los niños los peligros de los celos. Los cuentos pueden servir para enseñar a los niños la importancia del perdón. Los cuentos pueden servir para enseñar a los niños a superar sus miedos. En resumen, los cuentos pueden utilizarse para enseñar a los niños lecciones de vida.
Conclusión
Los cuentos de hadas pueden ser una poderosa herramienta para ayudar a los niños y adultos a aprender sobre el mundo y sobre sí mismos. Esto puede hacerse a través de lecciones morales, ejercicios de autodesarrollo y una serie de otras lecciones que cambian la vida. Estos cuentos también pueden utilizarse de forma creativa. Estas lecciones pueden servir para enseñar a los niños diferentes valores, ayudarles a superar sus miedos y a aceptar lo que son, y mucho más. Lo mejor es que los cuentos de hadas son interesantes y divertidos de contar. También son rápidos y fáciles de preparar. Por estas razones, los cuentos de hadas pueden ser una herramienta increíblemente valiosa para enseñar a los niños y a cualquier otra persona que pueda beneficiarse de ellos.